Historia
Debido a su situación geográfica, son innumerables las huellas de asentamientos desde épocas remotas. De la Edad de Bronce, data la necrópolis de cuevas artificiales correspondientes al II milenio A.C. De la ciudad romana Marciago proceden importantes restos arqueológicos, como la escultura del dios Atis, columnas de mármol rojo, mosaicos y 28 denarios oficiales romanos encontrados en la localidad y cuya cronología los sitúa entre el 149 y el 77 a.C. Asímismo, quedan vestigios de numerosas villae (explotaciones agrícolas) y de la necrópolis que ocupó varias hectáreas.
De la época hispanomusulmana aún se conservan restos de antiguas fortificaciones (Gailir, El Castellar, Pozo Amargo) y de algunas alquerías con sistemas de almacenamiento (silos).
En 1835, tras un largo litigio, consigue la independencia de Morón de la Frontera.
Fiestas
- El Toro de Aguardiente. Celebrado el primer día del año. Jóvenes de la localidad corren delante de reses sueltas hasta el anochecer.
- Carnaval. Es otra de las festividades que más ha crecido en los últimos años. Es reconocida en la comarca por la creatividad de sus disfraces y la originalidad de sus pasacalles.
- Romería de la Patrona. En honor a Santa Mª Magdalena, se celebra a mediados de julio. Congrega en procesión a creyentes y romeros hasta la Ermita de El Almendral.
- Feria y Fiestas de Agosto. Tienen lugar del 13 al 17 de agosto. Es el momento de las veladas, los concursos y los espectáculos.
- Fiesta de las Candelas. Se celebra el último día del año. Los vecinos despiden el año encendiendo una gran hoguera en la plaza del pueblo.
Gastronomía
Entre los platos más recomendados podemos destacar los espárragos trigueros, cocinados en sopa de pan y a modo de revuelto, la boronía de calabaza, el conejo y la liebre de campo en la temporada de caza y las tradicionales sopas vueltas. También hay que destacar la charcutería y los embutidos de la zona. En repostería las tortas de hornazo, los pestiños y los populares molletes.